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Sales del Mar Muerto Lavanda
15,00€ IVA inc.
Si lo que quieres es un baño ecológico para conectar, entrar en profunda relajación y/o prepararte para ir a dormir plácidamente, estas sales de baño serán tus mejores amigas. Y es que la lavanda te ayudará a bajar el estrés y a gozar de un ratito de relax y escucha interna.
Además, también te aportarán otros beneficios a tu piel y a tu salud.
Descripción
Todas estas sales de baño del Mar Muerto están extraídas directamente de una grieta que alimenta las aguas del río Jordán y de otras fuentes minerales, por lo que tienen una gran concentración en:
- Magnesio: ayuda a curar de heridas.
- Bromo: ayuda a calmar el sistema nervioso.
- Yodo: muy importante en la regulación de la tiroides.
- Potasio: ayuda a regular el contenido de agua en la piel.
- Óxido de zinc: actúa como protector solar natural.
Indicado para
- Para todo tipo de pieles.
- Para entrar en equilibrio, relax y purificar el cuerpo y la mente.
Ingredientes
MARIS SAL, LAVANDULA HYBRIDA OIL*, LINALOOL**, LIMONENE**, GERANIOL**, AMYLVINYLCARBINYL ACETATE**, COUMARIN**.
* Ingrediente ecológico certificado.
** Ingrediente procedente de los aceites esenciales.
Producto cosmético con un 100 % de ingredientes ecológicos.
Certificado por BIO.INSPECTA-VIDA SANA.
Modo de empleo
- Si vas a hacerte un baño completo: Pon unos 100 gramos de sales en tu bañera (con el agua a unos 37ºC).
- Para el baño de pies: en el agua calentita o fría (como prefieras), añade unos 50 gramos de sales.
¡Truco!
Esos días que sientes que necesitas una buena limpieza energética para limpiar y purificar todas aquellas sensaciones que has absorbido en esos lugares donde has estado, las sales con lavanda serán tu mejor aliado en la ducha o en un recipiente donde poner los pies. Y, si tienes niños, es una buena excusa para conectar con ellos y disfrutar como si fueras uno de ellos.
Como exfoliante: si lo mezclas con un poco de leche limpiadora o con tu aceite vegetal favorito, puedes usarlo como exfoliante para el rostro y el cuerpo. Es delicioso 🙂
¡Consejo!
Vigila que el saquito no entre en contacto con el agua, ya que sino se mojarían y se dañarían. Además, aunque las sales no se estropean, revisa la fecha de consumo preferente para garantizar que sigue teniendo todo su aroma y propiedades.
