23,50€ IVA inc.
ERGYPHILUS® Íntima está especialmente formulado para favorecer el equilibrio de las microbiotas vaginal y urinaria, gracias a 6 diferentes tipos de cepas vivas, idénticas a las naturalmente presentes en la flora vaginal humana; además, contiene vitamina B2 que contribuye a mantener la mucosa vaginal sana.
EQUILIBRIO Y CONFORT URO-GENITAL
ERGYPHILUS® Íntima es un complemento que combina 6 cepas de lactobacilos y bifidobacterias cuidadosamente elegidas para cuidar tu flora íntima de forma natural. Estas bacterias “buenas” destacan por su capacidad de llegar vivas al intestino, adherirse a la mucosa y protegerte frente a microorganismos no deseados, favoreciendo así el equilibrio y el bienestar íntimo.
SIN COLORANTES, SIN CONSERVANTES
SIN GLUTEN, SIN LACTOSA, SIN SOJA
250 ml
| Marca | |
|---|---|
| Formato | |
| Intolerancias y alérgenos |
Bote de 60 perlas
Almidón de patata, fructooligosacáridos (FOS), lactobacilos y bifidobacterias liofilizados, antiaglomerante: sales de magnesio de ácidos grasos; antioxidante: ácido ascórbico; vitamina B2 (riboflavina).
Cápsula: gelatina de pescado.
Alérgenos: pescado.
FASE DE CHOQUE: 2 cápsulas 2 veces / día. Durante 1 semana
FASE DE MANTENIMIENTO: 2 cápsulas / día. Durante 1 mes (hasta 3 meses en caso de recidivas).
ERGYPHILUS® Íntima está especialmente indicado:
| COMPOSICIÓN en miles de millones | por 4 cápsulas | %IR |
|---|---|---|
| Lactobacillus y bifidobacterias revivificantes | 32 | |
| Lactobacillus crispatus DSM 24619 | 7 | |
| Lactobacillus rhamnosus GG ATCC53103 | 4,4 | |
| Lactobacillus gasseri LMG 26661 | 7 | |
| Lactobacillus acidophilus DSM 21717 | 10 | |
| Lactobacillus fermentum AGAL NM02/31704 | 1,6 | |
| Bifidobacterium bifidum DSM22892 | 2 | |
| Fructooligosacáridos | 446 mg | |
| Vitamina B2 | 0,44 mg | 30% |
* Ingestas de Referencia.
Vía oral.
Una vez recibido, conservar el producto preferentemente a + 4°C.
Evitar choques térmicos continuos para garantizar el contenido en lactobacilos y en bifidobacterias hasta la fecha límite de consumo.
A partir de la pubertad, gracias a los cambios hormonales, se activa la microbiota vaginal, donde los lactobacillus son los grandes protagonistas en un entorno con pH ácido. Algo similar ocurre con la microbiota urinaria, también dominada por lactobacillus.
Esta flora íntima juega un papel clave como barrera protectora natural frente a bacterias, hongos y virus que pueden causar molestias vaginales o urinarias.
Sin embargo, este equilibrio es muy delicado y puede alterarse fácilmente por distintos factores (antibióticos, cambios hormonales, estrés, higiene inadecuada, etc.), lo que abre la puerta a problemas como vaginosis, candidiasis o infecciones urinarias. En todos estos casos, los lactobacillus se reducen notablemente y la protección natural se debilita.
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